En el verano uno de los
entretenimientos más sanos es la lectura.
“La lectura es pasar la vista por lo escrito o
impreso, haciéndose cargo del valor y
significación de los caracteres”; esta, forma e informa, permite la concepción
científica del mundo, desarrolla la cultura del pensamiento, valores éticos,
morales, estéticos, amplía el léxico y contribuye a formar la personalidad; es,
además, un maravilloso medio de entretenimiento.
La lectura de
un libro o de cualquier texto impreso es la clave para acceder a la herencia de
cualquier tema.
Un libro relacionado con determinado asunto puede hacer recordar y vivir épocas
pasadas o recientes que son agradables y necesarias en un momento clave de una
persona.
La lectura es crucial para el desarrollo de la
creatividad individual, mantiene la mente y la imaginación activas, refina la
vida interna y gratifica sus propios horizontes.
Las habilidades lectoras demandan un amplio rango de
competencias relacionadas con la lectura y estrategias de comunicación.
En una sociedad democrática, con un libre intercambio
de información, la palabra impresa es un elemento esencial en la capacidad
crítica del individuo.
En el plano político permite conocer y comprender de
manera efectiva los derechos y deberes que brinda el socialismo, llegar a
conclusiones objetivas del ámbito nacional e internacional.
Con el universo de la lectura se vincula el mundo de
la sabiduría, el espíritu crítico, la pasión por el saber, la belleza del alma,
la exigencia de libertad y sentimientos de solidaridad. Está dotada de un poder
de excelente límite de las diversas ciencias, que le informan, para sentirse en
el mundo de los valores y la reflexión.
Leer es un ejercicio que expresa y sostiene la
cultura de una nación, su fuerza espiritual y sus labores, su capacidad de
resistencia y desarrollo.
Son incontables los que valoran que un libro es más importante que cualquier otro
entretenimiento.
El amor por la lectura se adquiere mejor cuando los
padres ayudan a sus niños a descubrir los primeros libros, leyéndoles en voz
alta y contándoles historias; de esta manera la lectura se convierte en algo elemental,
familiar e íntimo, en un medio de comunicación idóneo.
La lectura influye en muchos aspectos de la vida.