domingo, 29 de noviembre de 2015

Annia en casa







Annia Martínez Báez, licenciada en Enfermería con el perfil de Obstetricia, desempeña una  misión en Venezuela y  vino a su tierra, Las Tunas,  Cuba, para disfrutar  las vacaciones con sus hijos,  la familia. Antes de   partir de nuevo  hacia la tierra de Chávez, tuve la oportunidad de conversar con ella.
Llega a Venezuela en noviembre del 2014. Trabaja en el hospital público Osío de Cúa, ubicado en el Estado de Miranda, municipio Urdaneta, ciudad Zamora. Cumple la Misión Niño Jesús, que es de materno-infantil y son dos, uno en Guatire y el otro en Cúa,  donde está. La jornada laboral es de 24 horas para 48.
Reside en un edificio de cinco plantas con buenas condiciones, es solo de cubanos, la brigada está compuesta por 83, cuentan  con un coordinador y un secretario del Partido Comunista de Cuba, ellos son los responsables de todo lo relacionado con ese personal,  se llevan muy bien. Celebran el Día de la Mujer, de los Padres, de las Madres; fin y principio de años…, todo  igual que acá en la Mayor de las Antillas
Su trabajo se encuentra  a solo cinco minutos de distancia y se  trasladan en buceta (guagua).
Se siente bien, sobre todo entre cubanos, pero siempre con la mente allí y el corazón en Cuba, en sus hijos, la familia, que para ella es fundamental. Cuenta que hay que hacer tremendo esfuerzo porque la nostalgia, ¡no es fácil!, pero el tiempo y el trabajo  ayudan.
Para Annia,  la misión es muy importante, porque con esta  se aprende mucho, y el mundo aprende de ellos y, además  de llevar ese sentir de humanismo y solidaridad, demuestran que los cubanos nunca dan lo que les sobra, sino que comparten lo que tienen.
Dice  que cuando termine esta tarea  y pase algún tiempo, si la Patria lo necesita, va al lugar requerido y cumple con su deber. No aconseja  a ningún colega a que vaya  o no, piensa que cada uno debe decidir  y experimentar por sí mismo.
Ella, afirma que: “Sí te digo algo,  si antes amaba a Cuba, ahora la amo más”.