Armando Hechavarría Guerrero (Las Tunas, 18/5/1947 -
25/12/2010).
Miembro de la
UNEAC, pintor, diseñador, grabador y escultor.
Hechavarría
fue fundador del movimiento plástico en Las Tunas: muralístico, gráfico y
escultórico, Premio de la
Ciudad y Personalidad
de la Cultura.
Su huella puede calificarse de fructífera y relevante. La obra artística de Armando es excelente, bella, debido a su preparación como escultor,
diseñador, pintor; al uso racional del espacio, la sobriedad, apuntaba hacia la
innovación. Cumplía con los requisitos de forma y contenido. En el uso de las
líneas, colores, en el acabado de cada obra que se traduce en una buena factura
y una presencia excelente. En el tratamiento de la técnica. Todo ello logra que
el espectador sienta la sensación de placer.
Las Jornadas Cucalambeanas, acontecimientos culturales de connotada
envergadura, fueron ambientadas por él
en sus principales escenarios y espacios expositivos, desde su origen y
durante 40 años. El primer afiche de este evento y la distinción principal que
se otorga a las personalidades participantes
(mascarilla de El Cucalambé sobre
laúd de madera), son de su autoría.
Conoció a la insigne escultora Rita Longa Aróstegui en 1977.
Conjuntamente con ella y Ferrero gestan
el Movimiento Escultórico Tunero,
episodio artístico de alcance nacional que ha perdurado hasta nuestros días. A partir de entonces a
Las Tunas se le conoce como Capital de la Escultura Cubana.
Armando es artífice multifacético, diverso, cultivador de disímiles
ramas artísticas. Su carrera incesante, dinámica e interactiva, lo erige como
promotor cultural desde sus inicios mismos, validado por su labor pedagógica,
difusora y de creador incansable, comprometido con su tiempo y su país; confirmando
siempre a Alejo Carpentier cuando dijo: El arte debe ser sólido, duradero, que modifique la estética de una época
al trazar nuevos caminos.
Obras suyas se
encuentran en galería y museos importantes de Cuba, además en otros países
como: Italia, Francia, España, Bélgica, Alemania, Brasil, Canadá, Argelia,
Hungría y USA.
Al hablar de la
escultura cubana, especialmente de la tunera, no es posible hacerlo sin
mencionar a Armando y su vasta y
excelente obra.