Armando, hoy 18 de mayo, cuando cumplirías 70 años, te recordamos como padre, abuelo, hermano, compañero, amigo, en fin, como el ser humano capaz de tenderle la mano a cualquier necesitado. Las calles de Las Tunas, el parque Maceo, la Uneac, tu familia y amistades extrañamos tu imagen y tu lento, pero firme andar.
La Unión de Escritores y Artistas de Cuba te acogió en su seno. Fundaste el movimiento plástico en Las Tunas: muralístico, gráfico y escultórico.
Las figuras situadas en hospitales, carreteras, instituciones y en otros lugares, parece esperan para ser restauradas y embellecidas por ti, saben que las creaste con mucho amor.
Ambientaste las Jornadas Cucalambeanas y los acontecimientos culturales en sus principales escenarios y espacios expositivos desde su origen durante 40 años. De tu autoría son el primer afiche de este evento y la distinción principal que se otorga a las personalidades participantes (mascarilla de El Cucalambé sobre laúd de madera).
Tú, Ferrero y la distinguida Rita Longa Aróstegui, en 1977 gestaron el Movimiento Escultórico Tunero, suceso artístico de alcance nacional que ha perdurado hasta nuestros días. Desde entonces a Las Tunas se le conoce como la Capital de la Escultura Cubana.
Tus excelentes obras se encuentran en galerías y museos importantes de Cuba, y en otros países como Italia, Francia, España, Bélgica, Alemania, Brasil, Canadá, Argelia, Hungría y USA, estas te mantienen vivo.
Obtuviste el Premio de la Ciudad y Personalidad de la Cultura…
Algunas de sus obras.
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