Mi Padre, el mejor
Papi, si hoy Día de los Padres estuvieras junto a nosotros, tus hijos, ¡qué felices nos harías!, te fuiste hace tantos años; sin embargo, parece que fue ayer porque seguimos recordándote y queriéndote como siempre. El tiempo no logrará borrar tu imagen ni tu ternura ni tantos bellos recuerdos, tampoco tus buenos consejos y regaños que, por cierto, eran muy necesarios y oportunos.
Estas breves y sencillas líneas no significan nada ante tu ausencia, pero sí para que estés convencido de que te adoramos y de que seguirás siendo el PADRE ESPECIAL, el mejor para tus ocho hijos.
Aquí te dejo unas de tus flores preferidas.
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